Nos subimos al Volkswagen California Beach y la sensación de libertad ya nos embarga al volante de este vehículo, pues con el motor en marcha, solo queda hacernos una pregunta: ¿dónde vamos? y si no tenemos la respuesta inmediata, tampoco importa demasiado, pondremos rumbo a la carretera y ya veremos adónde nos lleva.
La gama T de Volkswagen Vehículos Comerciales es por definición el camper por excelencia en nuestro país y en buena parte de Europa. Aunque, en la actualidad, se trata de uno de los segmentos vinculados a los vehículos comerciales con más auge y potencial de crecimiento, la gama California, en todas sus variantes, sigue siendo una de las más vendidas. Porque a bordo del California pocos límites encontraremos, pues la dilatada experiencia de Volkswagen en el segmento garantiza ciertas comodidades y desarrollos que nos permitirán viajar sin límites.

En esta ocasión, lo hacemos en la versión California Beach. Aunque a día de hoy tendremos dos variantes, Beach Tour y Beach Camper, en estas páginas hablaremos del California Beach con el motor diésel de 2 litros y 198 CV de potencia máxima, combinado con la transmisión automática DSG, que cumple con la norma medioambiental Euro 6B.
Esta unidad del Volkswagen California Beach cuenta con una longitud máxima de 4.904 mm y una anchura de 1.904 mm, que podremos aprovechar íntegramente para disfrutar de aquellos lugares que queramos visitar, en el momento que más nos convengan. Así que para ello realmente nos interesa abordar su habitabilidad en el interior y las soluciones para disfrutar del ocio y tiempo libre con los nuestros, pues su conducción ya se nos antoja sencilla y cómoda, porque puesto de conducción nada tiene que envidiar a un turismo de alta gama, complementado con el cambio automatizado que nos brindará una conducción relajada.

¿Qué esconde en su interior?
La variante Beach del California es la más camper, sin los acabados propios de autocaravana que, con los años, el fabricante alemán ha ido incorporando. De este modo, el Beach se reafirma como el descendiente directo del mítico Bulli; eso sí, con capacidad para cinco ocupantes durante el día y cuatro para pernoctar. Pues la banqueta de la segunda fila de asientos es convertible en una amplia cama de matrimonio, al mismo tiempo que el techo elevable nos hará ganar habitabilidad en el interior del vehículo, pero por la noche podemos convertirlo en otra cama en el techo de 2.000×1.200 mm, con somier y colchón.
Esta versión de Volkswagen cuenta con un set de mesa y sillas para poder disfrutar del paraje fuera del habitáculo cómodamente bajo el toldo que se monta de origen, junto con el techo elevable en el California Beach. La mesa también la podremos montar en el interior, entre la banqueta de la segunda fila de asientos y los asientos delanteros giratorios. Mientras que las sillas apenas nos ocuparán espacio en el vehículo con el ingenioso sistema de Volkswagen para guardarlas en el portón trasero.

El sistema de raíles en el suelo nos permite mover a placer la banqueta de tres asientos hacia delante o detrás, en función de las necesidades de la configuración interior; hacia delante para montar la cama, hacia detrás para incorporar la mesa y ganar espacio en el comedor, como decíamos a placer.
Todas las ventanas y lunas del vehículo cuentan con cortinas para garantizar la oscuridad total en el interior a la hora de pernoctar y conciliar un reparador descanso que nos permita continuar ruta al día siguiente.

En este Beach, no contaremos con la cocina y su mueble, pues es la versión más puramente camper de la serie T6, así que contaremos con los elementos estricta y puramente necesarios para viajar y pernoctar. Aunque siempre podremos incorporar opcionales para ajustar el camper a nuestras necesidades, no en vano, Volkswagen Vehículos Comerciales ofrece uno de los más amplios catálogos en componentes de este tipo, incluso, personalizados con logotipos y demás detalles.