Con el tiempo, a la hora de transformar nos proponemos retos y pasamos a probar nuevas técnicas de modelismo para personalizar el vehículo. Con esta maqueta del Opel Blitz a escala 1:43 hemos querido poner toda la carne en el asador y fabricar una nueva puerta abierta, puesto que nos parecía más convincente el modelo.
También hemos desechado la caja de carga para mudanzas con la que venía la maqueta original y le hemos fabricado otra caja de cartolas, que hemos reciclado de otro vehículo, en concreto del 3HC, y que hemos envejecido convenientemente.
Para comenzar la personalización de este Opel Blitz desatornillamos el modelo por completo y separamos todos los elementos del vehículo: la caja de carga, la cabina, los interiores de la cabina, los faros de las aletas, los cristales, el salpicadero, las ruedas y gomas, etc. Una vez despojado de todos los elementos, procederemos con el truco de esta semana para fabricarle la puerta abierta para terminar fijándola con pegamento extrafuerte a la cabina.
Mientras seca la transformación de la cabina, ajustaremos la nueva caja de carga al chasis. Nos hemos encontrado con que el chasis es más largo que la caja del 3HC, con que procedemos a cortarlo para adaptarlo. Lo haremos con la ayuda de la rotaflex, puesto que recordad que estos camiones son de hierro. Una vez adaptado el chasis y la caja, los montamos para pintarlo en tonos blancos y grises. Pasamos a unir la cabina con la caja, para colocar las llantas y las ruedas en su sitio.
Como veréis en las imágenes, en la caja de carga hemos querido colocar un motor y una hélice envejecidos como mercancía, así que debemos darle un efecto a las ruedas de sobrecarga. Para conseguirlo, hemos taladrado el eje trasero hacia arriba para aproximarlo a la caja de carga y, a su vez, hemos levantado el eje delantero para terminar de mejorar el efecto.
Con las técnicas del pincel seco y fresco procedemos al envejecimiento del vehículo y a colocar todos los elementos que queramos de cosecha propia, como matrículas, placas de velocidad y demás detalles que conformarán una transformación y personalización total. Nadie tendrá una maqueta igual que la nuestra.
Más trucos
Para fabricar puertas que permanezcan abiertas, ponemos la cabina en el banco de trabajo y desprovista de todos los elementos que la componen. Solo dejaremos las tapas del motor, el frente, el techo, la trasera y las puertas.
Recortamos una de las tapas de aluminio que traen los botes de leche en polvo, y que el trozo cuente con medio centímetro más por todos los lados de la pieza que vayamos a copiar. Ponemos el retal en el perímetro de la puerta, la fijamos al lado del techo con un trocito de cinta de carrocero.
Ahora, con la punta del destornillador plano, dibujamos el contorno de la puerta para calcar la pieza original, pues incluso pasamos por la manilla. Una vez tenemos calcada la puerta, con la rotaflex y la cabina bien sujeta separamos la puerta original para reemplazarla por la réplica, que esta vez dejaremos abierta.