Citroën anuncia que durante el segundo semestre de 2020 llegará a los concesionarios la versión 100% eléctrica de su exitoso Jumpy. Denominado ë-Jumpy, vendrá a aportar nuevas soluciones de movilidad, no solo por el libre acceso a zonas restringidas con límites de emisiones, sino porque mantiene ventajas con las versiones térmicas como el volumen de carga.
Como diferencias estéticas, este nuevo furgón se distingue por la trampilla de carga situada en la aleta delantera izquierda, también destaca una rejilla de calandra intermedia en el frontal y el logo ë colocado tanto a la derecha de la calandra como en la puerta izquierda trasera.
Así, el ë-Jumpy se oferta en tres longitudes de carrocería, con una versión XS de 4,60 metros, ideal para entornos urbanos. La talla M mide 4,95 m y la XL alcanza los 5,30 metros. La carga útil se sitúa entre los 1.000 y los 1.275 kilogramos, en función de la versión escogida.
Polivalencia en modo eléctrico
Con hasta quince funciones de ayuda a la conducción, el comportamiento rutero de este furgón es muy placentero, con un reglaje de las suspensiones que garantizan una óptima ruta, en ausencia de vibraciones y ruidos.
En cuanto a la motorización de este Citroën, el bloque eléctrico desarrolla una potencia de 100 kW (136 CV) con un par de 260 Nm. Cuenta con un selector de tres modos de conducción: Eco, Normal y Power. Mientras, se puede elegir entre dos potencias de batería diferentes, asociadas a dos niveles de autonomía. Por un lado, una batería de 50 kWh formada por 18 módulos que da una autonomía de 230 kilómetros en ciclo WLTP. Por otro, una batería de 75 kWh, formada por 27 módulos, con una autonomía de 330 kilómetros.