Félix solo concibe llevar su Scania S580 curioso y atildado. Lo primero que hace al llegar a un área de servicio es repasarlo en firme. El descanso, si no es así, no sería descanso para él.
Son maneras de vivir, como cantaban Leño y Rosendo. Este autónomo calagurritano entiende que para muchos conductores de camión el suyo sea un oficio más, pero para él esa definición se queda muy corta.
Está acostumbrado a que le miren con extrañeza cuando se queda pasándole el paño a las llantas mientras otros acuden rápido al calor del café del área.
También escucha algún que otro comentario socarrón cuando él y su inseparable amigo Miguel Ángel ocupan algunos fines de semana en maquear sus camiones, pero su honradez y cordialidad acaban conquistando cualquier plaza terrenal y humana.
“He de reconocer que aquí no es como en Cantabria, Cataluña o Asturias. En La Rioja –matiza Espinosa– somos cuatro contados los que tenemos debilidad por la aerografía y el Holland Style.
Cuando llueve, algunos te preguntan que por dónde has venido para tener el camión impecable, o que por qué no lo llevo a un lavadero, si me ven con el trapo en la mano.
¿Qué voy a hacerle? Me gusta llevar el vehículo elegante y he de decir que también son muchos los que lo aprecian, me piden subir a la cabina o se hacen fotos a su lado. Soy amable con los curiosos –de eso no le cabía duda a este periodista–, sobre todo si son chiquillos. Mi carácter es así. Por muy malo que sea un día, de su balance final siempre saco ratillos buenos”.
Félix compró este Scania S580 casi nuevo y lo puso en manos riojanas expertas en este tipo de lides, como las de Maturana y David, para pintura, escapes, tapizado, etc.
El contraste del azul y el negro es lo que le da ese toque Holland que más llama la atención a primera vista, pero un visionado más explícito nos hace reparar en su alerón, la quinta rueda, los apliques en el guardabarros, el azul en el interior de los escapes y el tapón del depósito, el tapizado interior o los faros. La inspiración siempre llama a la puerta de Félix, enarbolando nuevas ideas.
Buscar viaje
Espinosa es autónomo a la antigua usanza. Su viaje de ida es con envases de pintura vacíos para Cataluña. La vuelta, sin embargo, hay que lucharla.
“Conduzco, busco viaje, hago trámites… en fin, soy un autónomo de esos que se dice que están en vías de extinción, pero te aseguro –sonríe– que nunca me ha faltado viaje por España. Duermo todos los días en el camión y el fin de semana lo disfruto con la familia”.
Félix se fogueó durante un año acompañando a su padre en el mismo MAN con el que se examinó después. Con el carnet en la mano, y 21 años en bandolera, ya no ha parado nunca. Compró de primeras un Mercedes 19 35,y ha ido pasando posteriormente por diversos modelos Volvo y MAN, hasta llegar a este Scania S580.
Para el reportaje concertado en esta mañana riojana, de recién estrenada primavera, se acompaña de su inseparable amigo Miguel Ángel y su Volvazo decorado.
Ambos se ayudan mutuamente cuando uno de los dos idea algo para su camión. “Para los que nos apasiona un camión acicalado, la pandemia ha suscitado déficit de concentraciones. Nosotros hemos disfrutado mucho en Montmeló, Torrelavega, Barakaldo o el Solo Camión Festival.
En eventos así –afirma sonriente– ocurre que el que pasa a ser extraño es el que no ensalza su camión. En jornadas laborales al uso, además, es difícil pararse a hablar con los compañeros, porque vamos todos con el horario a cuchillo. Aquella suerte de mesas de bautizo que se formaban en La Panadella o el 103 son ahora impensables.
Por eso me gusta ver en vuestra revista y las redes a nuevas generaciones que defienden lo nuestro, como Jóvenes del Camión. Este oficio es y será todo lo grande que queramos hacerlo los que lo interpretamos cada día”.