La quinta generación del Volkswagen Transporter llegó al mercado europeo a finales de 2003. Desde entonces ha ido evolucionando, tanto estética como mecánicamente. La denominación Multivan le concede el carácter de vehículo de pasajeros. En esta ocasión la combinación escogida es el versátil motor TDI de dos litros de cilindrada y 140 CV, acompañado de un cambio manual de seis velocidades y, como un auténtico extra muy destacable: la magnífica tracción a las cuatro ruedas 4Motion.
La motricidad total confiere a nuestro protagonista un comportamiento totalmente distinto al de la gama convencional, que no la disfrutan. Lo primero que notamos es la sensación de que cuesta un poco más lanzarlo, que desde luego tiene su lógica en que debe arrastrar mucho más rozamiento, a 
tiempo que algo más de peso. Esta sensación se convierte en seguridad en la primera curva que abordemos, ya que notaremos cómo el Multivan se agarra al suelo como si estuviese literalmente pegado. Este 4Motion ha sido mejorado con respecto a la anterior generación y ahora trae consigo un modulo Haldex 4. Lo más notorio del sistema 4, aparte de su rapidez, suavidad y silencio de funcionamiento, es que, a diferencia del anterior módulo mecánico, ahora dispone de una regulación electrónica. En este embrague de discos múltiples, la distribución del par de fuerza en el tren trasero, generado por la presión de aceite, ya no se produce mediante la diferencia de régimen de revoluciones entre los ejes delantero y posterior, sino por medio de una bomba eléctrica que alimenta un depósito de reserva de aceite a presión. Éste permite que se desconecte la bomba eléctrica a intervalos, con lo que se reduce el consumo de combustible. Mediante una válvula regulada electrónicamente, transmite este depósito la presión a los discos múltiples del embrague y, según la intensidad de la presión, se puede variar el flujo de fuerzas sobre las ruedas traseras de modo preciso y sin escalonamientos. En caso extremo, es incluso posible la distribución de fuerzas de hasta el 100% sobre el eje posterior.
El motor TDI de 140 CV se muestra más que suficiente para mover todo el conjunto y el cambio está muy bien escalonado para aprovechar todo el potencial, aunque hay que recordar que estamos hablando de un vehículo con una masa considerable y que no goza precisamente de una línea muy perfilada. Aun así, como decimos, el dos litros se conforma con unas cifras de consumo bastante razonables. También hay que destacar que este motor se ha suavizado mucho en su comportamiento desde que se le implantó el sistema common rail y, aunque en el Multivan no se llegó a montar la versión anterior, sí que tuvimos ocasión de probarlo en otros modelos como para apreciar el cambio significativo que se ha producido.
Evidentemente, para el que quiera algo más de potencia sin renunciar a la tecnología del gasóleo, contamos con la versión superior, y que ya probamos en su día, de 180 CV con doble turbo.
Buenos acabados
Aunque no se trata de la versión más equipada de la gama Multivan, tanto el equipamiento como los acabados que trae consigo está en un buen nivel. Esta versión denominada Confortline Edition está justo por debajo de la más equipada Highline y carece de elementos de lujo que no son estrictamente necesarios, pero a la vez cuenta con casi todo lo imprescindible. Quizás lo menos positivo es que si queremos montar algún opcional, quizás la lista de precios no sea barata.
Lógicamente, la configuración interior de los asientos también podrá adaptarse a nuestras necesidades y, aunque en esta ocasión la unidad venía con la posibilidad de transportar hasta siete personas, podremos elegir varias opciones y adaptarlas a lo que más nos convenga. De todas maneras se nos antoja que la persona que adquiera un Multivan se sentirá satisfecha en cuanto al tratamiento de los ocupantes, ya que se goza de un interior amplio y unos asientos muy cómodos, así como espacios y huecos portaobjetos para llevar todo lo necesario. Otra cosa muy destacable del T5 es que puede presumir de llevar a siete personas y contar con un maletero muy capaz para poder albergar un generoso de equipaje.
Un aspecto que nos satisfizo especialmente es la importancia que concede el constructor en el área de seguridad. No echaremos en falta los elementos electrónicos más importantes para asistir al conductor, que junto con la tracción total harán mucho más seguros nuestros trayectos.
Apuesta segura
Estamos convencidos de que todo aquel que se decida por este modelo no se sentirá defraudado. Son muchos los argumentos que atesora como para tutearle su valía, aunque siempre habrá algún purista que le busque los tres pies al gato. Opinamos que con esta versión el constructor alemán ha conseguido un buen equilibrio en varios aspectos importantes como la seguridad, comodidad, austeridad y potencia.
Durante todo el trayecto de la ruta que realizamos nos hemos sentido muy cómodos, y la sensación de conducir casi 400 kilómetros del tirón era como si se hubiesen pasado en un abrir y cerrar de ojos, lo que significa que la conducción es muy relajada. Si a todo esto añadimos las buenas cifras obtenidas tanto de consumo como de velocidad media, llegaremos a la conclusión de que estamos ante un verdadero correcaminos del asfalto, que puede adentrase en pistas forestales sin ningún tipo de complejos gracias a la dotación 4Motion.
Por todo ello no podemos más que recomendaros que si estáis pensando en la adquisición de un vehículo de estas características, probablemente estemos ante uno de los mejores de su categoría.
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