Los técnicos de Continental trabajan intensamente en el desarrollo de nuevas soluciones que hagan que los transportistas aumenten la carga útil y reduzcan las emisiones, los consumos y los costes operativos.
El trabajo tiene sus frutos y la marca ha sido capaz de lograr un ahorro de combustible de hasta 6 l a los 100 km, aplicando de todas las tecnologías de fabricación en serie y en fase de desarrollo para la producción en serie.
El cálculo de los seis litros se ha determinado basándose en un camión de 470 CV, de 40 toneladas de peso bruto, Euro 6, con cambio manual robotizado en una autopista con inclinación y curvas variadas con una velocidad típica de 85 km/h.
Algunas de las soluciones se podrán ver en el próximo salón IAA de Hannover. Hablamos de suspensiones neumáticas de peso reducido, neumáticos de bajo consumo de combustible, así como un catalizador de oxidación diésel reducido. También se exhibirán tecnologías ya conocidad como el sistema de sensores eHorizon o el ProViu Mirror, un dispositivo digital que sustituye los retrovisores exteriores y ofrece un potencial ahorro de hasta 0,6 litros.
En el caso de las suspensiones neumáticas de Continental, el transportista gana de 12 a 15 kilos de carga por eje. En caso de un rendimiento kilométrico de 400.000 km, las emisiones de CO2 se reducen en 200 kilos. En comparación con los pistones de acero habituales, esto se traduce en hasta un 75% menos de peso mediante el empleo de un material sintético especial.
En el IAA, Continental presentará una solución para el tratamiento posterior de los gases de escape cercano al motor. Al ubicar el catalizador de oxidación diésel cerca del propulsor, su volumen puede reducirse en un 30% aproximadamente.
En Hannover, Continental también dará a conocer su nueva línea de neumáticos Conti EfficientPro para eje de dirección y de tracción. Estas gomas con resistencia optimizada a la rodadura se han diseñado específicamente para el transporte de larga distancia por vías rápidas y autopista.
Esta gama ha obtenido la calificación “A” en el etiquetado europeo de neumáticos referente a la máxima eficiencia en términos de consumo de carburante, gracias a su baja resistencia a la rodadura.