Esta semana se han reunido la ministra de Fomento, Ana Pastor, con el secretario de Estado de transportes de Francia, Alain Vidalies, y aunque el encuentro no se ha centrado en la situación que vive el transporte español en suelo francés, ambos representantes defienden la libre circulación de los transportistas en Europa como un derecho básico. Ambos representantes se han comprometido a tomar medidas para evitar que se repitan ataques a transportistas españoles, aunque sin concretar ningún tipo de medida específica.
Mientras, la Asociación Española de Empresarios de Transportes Bajo Temperatura Dirigida (ATFRIE) por su parte, ha enviado una carta denuncia al Primer Ministro francés, Manuel Valls, por el acoso que sufren camioneros españoles en su país.
Según afirma Javier de Mauricio, secretario general de la asociación, “¿El “patriotismo” esgrimido por Hollande y Valls en el consumo de productos franceses, acaso permite la impunidad de los actos de esos salvajes?”. El secretario general también hace especial hincapié en la actuación de la gendarmería francesa quienes no hicieron nada ante las agresiones que sufrió el conductor español, en los últimos sucesos acaecidos en la pequeña localidad de Poitiers.
No debemos olvidar que en el mes de marzo ya saltaban las alarmas ante la noticia de un camión que transportaba carne española fue quemado, sin lamentar daños personales, afortunadamente, por el mismo motivo en una estación de servicio en Landivisiau.
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